Haswell es el nombre que ha dado Intel a la nueva arquitectura (último Tock realizado a la familia Core) de cuarta generación de la familia de procesadores Intel Core. Con esta nueva arquitectura, llega una cantidad de mejoras bastante aceptables para los procesadores de Intel, así como, nuevas características que aseguran mejorar considerablemente el rendimiento de los ordenadores y ofrecer una tecnología mucho más verde, bajando los patrones de consumo de energía.
Llegando a más dispositivos
Una de las características más destacables de esta nueva arquitectura Haswell, es que se ha ampliado el espectro de uso para estos procesadores. De este modo, no solamente hay modelos del procesador para equipos de sobremesa y portátiles, sino que también se llega a otros equipos, como tabletas, all-in-one, entre otros.
Con esta visión de estandarización, también vienen diferentes modelos de procesadores para adecuarse a todo tipo de equipos, ofreciendo procesadores libres para realizar Overclocking, para equipos de gama baja y por supuesto, los más poderosos, para equipos de gama alta.
Haswell a fondo
Intel cuenta con un sistema de actualizaciones llamado Tick Tock, Haswell es un Tock (o cambio completo de arquitectura) que se le realiza a los procesadores Ivy Bridge manteniendo los 22 nanómetros, con el principal objetivo de minimizar el consumo de energía y elevar el rendimiento del procesador.
La magia de esta nueva arquitectura se centra en la adición de chipset dentro del procesador, para optimizar los mecanismos de uso de energía por parte del hardware, de tal manera, que equipos de bajos recursos como un Tablet o un Netbook, puedan ofrecer mayor cantidad de tiempo para reproducir videos o música con la misma cantidad de energía que con los procesadores anteriores.
También, debemos destacar que la nueva estrategia de optimización de espacio, les permitirá a los fabricantes de equipos crear productos mucho más finos y pequeños. Es de esperar que los procesadores Haswell presenten mejoras considerables en cuanto a gráficos, gracias a Iris (la nueva generación de gráficos), dando soporte a las nuevas tecnologías de video y gráficos y a la reproducción de formatos HD con mayor velocidad y estabilidad, lo que los hace ideales, tanto para reproducciones audiovisuales o juegos de última generación.
Como contraparte, trae un nuevo Socket LGA1150, lo que obligará al fabricante a venir con una nueva generación de placas madre. También, vendrán equipados con chipset Intel 8 Series, ofreciendo versatilidad de trabajo y un sistema de cambio, para adaptarse a ultrabooks y equipos pequeños, lo que dará una estandarización nunca antes vista en los últimos años.
Estamos ante una nueva arquitectura, que toma en cuenta el rendimiento y el consumo, ofreciendo además muchas mejoras menores, como mayor caché y comodidades de dimensionamiento, que darán un espectro más amplio a esta familia de procesadores, lo que pareciera ser una buena señal para todos los usuarios que tengan equipos con procesadores Intel Haswell.