En los siguientes tres artículos que mencionaremos a partir del actual, indicaremos los tipos de antivirus que existen al momento así como la forma de presentarse cada uno de ellos para con el usuario.
En este capítulo analizaremos dos formas de presentación de un antivirus, mismos que hagan referencia al estado pasivo así como al estado activo de dicho software.
Antivirus pasivo.
Sin importar la versión de antivirus que se disponga en el ordenador, cuando éste se encuentra instalado en el sistema operativo y por alguna razón el usuario ha decidido desactivarlo (que no es lo mismo a la desinstalarlo), es que este antivirus solamente está presente en el equipo sin hacer ninguna función específica en beneficio del usuario.
Antivirus activo.
Este viene a ser el caso contrario al que hemos mencionado en el párrafo anterior, ya que quiere decir que el software antivirus se encuentra instalado en el sistema operativo con cada una de sus funciones activas, mismas que se encuentran alertas ante cualquier eventualidad que pueda llegar a presentarse; el hecho de que se encuentre el software antivirus activo, no necesariamente quiere decir que esté realizando un escaneo de archivos, ya que esto es simplemente una programación que el usuario llega a realizar de acuerdo a su preferencia en el entorno de trabajo.
Como hemos podido observar, en ambos casos el software antivirus se encuentra instalado en el sistema operativo, con la única diferencia de que el primero está desactivado en todas sus funciones (algunos usuarios hacen esto para instalar software ilegal) y en cambio en el segundo caso que el mismo software antivirus está pendiente de cada una de las acciones que realicemos en el equipo.
Sigue en: Tipos y estados de un antivirus (II)