Siempre que hemos escuchado a uno que otro usuario hablar sobre las descargas en BitTorrent, lo único que tenemos claro es de que se va a tratar de buscar un archivo para descargarlo al computador.
Hoy en día es así como se ve este panorama, pero en sus inicios ese protocolo y programas a la vez que conforman al BitTorrent, fueron creados con el propósito de compartir un mismo archivo en toda una comunidad.
Esa fue la idea del programador estadounidense Bram Cohen, quien vio de forma inteligente que si un archivo se encontraba compartido por más número de usuarios, existirían muchas semillas más de las cuales un nuevo cliente podría valerse para descargar al mismo, y compartir sus descargas hacia otro nuevo usuario.
Ese es el fundamento principal con el cual nació BitTorrent en el año 2001, programa que fue realizado exclusivamente en Phyton bajo licencia MIT. De esta manera es que un usuario puede utilizar todo el ancho de banda de su conexión a Internet para adquirir un total de varias semillas; es decir, que en ese total existirán partes del archivo de usuarios con una conexión lenta, y otras partes del mismo archivo que en cambio pueden tener una conexión mucho más rápida a Internet, haciendo de esta manera que la integridad de dicha descarga se haga en menos tiempo que el que se lograría realizar con un gestor de descargas de algún sitio oficial de la misma aplicación.
En la actualidad existen una gran cantidad de aplicaciones que son compatibles con BitTorrent, mismas que hacen las veces de clientes y que pueden estar escritos en diferentes lenguajes de programación que más bien tienen que ser compatibles con el sistema operativo en el cual se va a trabajar.