Posiblemente los hayamos escuchado muy poco en la actualidad, y es que en realidad estos vienen a ser una evolución de los muy conocidos «código de barras».
Para poder describir o tratar de definir lo que significan los códigos QR debemos antes tratar de hacer mención acerca de sus predecesores, es decir de los «códigos de barras», mismos que han facilitado el trabajo en los diferentes campos de la industria.
Los códigos de barras vienen a ser representados por una serie de líneas paralelas entre sí, pero que tienen la característica principal de que se diferencian una de la otra en el grosor que éstas tiene, lo cual viene a representar a un valor específico dependiendo de cómo se le haya estructurado; esto referente que algunas líneas son más gruesas que las otras, habiendo determinados valores que utilizan en cambio a dos líneas muy delgadas, con el fin de no utilizar a una demasiado gruesa.
Los códigos de barras son fácilmente identificables con aparatos o dispositivos preparados para ello, pudiendo observarse en los diferentes productos y artículos que se vende en el mercado a estas etiquetas, en cuya parte inferior se dispone el valor de cada una de estas líneas cuando estos impresos tienen un tamaño considerablemente grande.
De esta manera es que los «código de barras» viene a ser una representación líneal del valor de un artículo determinado; esa es la diferencia con los «códigos QR«, pues éstos vienen a representar en cambio a una serie de pequeños cuadrados o cubos que se muestran de manera bidimensional y hasta posiblemente podríamos decir que de forma desordenada.
A primera vista, podría decirse que estos no tienen ningún sentido o interpretación, pero al igual que sus antecesores, que podría decirse que son una evolución de los códigos de barras, éstos vienen a guardar determinados valores y en algunos casos especificaciones de una marca o un artículo.
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