Microsoft lucha por conseguir que todos sus productos tengan una eficiencia enorme a la hora de que sus productos llegan a nuestras manos, y uno de estos productos es su navegador de preferencia, es decir el Internet Explorer, mismo que ya está en su versión 8 al momento actual.
Cada una de estas versiones de Internet Explorer nos ayudan a optimizar nuestro sistema de navegación y desde sus versiones más antiguas todos las conocemos casi sin necesidad de necesitar un referente, ya que por defecto viene incluido en su sistema operativo como el navegador por defecto.
Pero que es lo que pasa cuando alguien dispone de un sistema operativo más serio para trabajos de mayor relevancia. Por ejemplo si alguien dispone de Windows Server (sea 2003 o 2008) éste navegador deja de tener su eficiencia y se vuelve un dolor de cabeza para el usuarios común.
Paginas a veces demasiado simples no pueden abrirse ya que para seguridad de Windows, la mayoría se encuentran bloqueadas o requieren de un permiso administrativo para poder entrar en estas páginas.
La realidad del caso es que Windows Server, en cualquiera de sus versiones, controla cada una de sus aplicaciones de manera de garantizar que el sistema no llegue a dañarse, ya que como todos sabrán todo servidor (incluyendo a esto su sistema operativo) debe de mantenerse encendido las 24 horas del día en todo el año, por lo que no se puede dar el lujo de dar un formateo del disco para un mantenimiento que seguro llevará un día de pérdida de tiempo y de administración de los terminales conectados a este.
Pero hay quienes han instalado Windows Server por cuestión de seguridades en sus equipos para evitar que virus de todos los tipos (spyware por ejemplo) lleguen a dañar el sistema, pero no requieren de un navegador tan conflictivo, así que muchos han optado por Mozilla Firefox, mismo que da una seguridad de navegación bastante aceptable y no tiene restricciones que le impidan navegar en tal o cual sitio.
No se está aconsejando utilizar uno u otro, sino más bien aclarando que para quienes no tengan un conocimiento tan amplio en el campo de servidores y de la configuración de un navegador determinado por defecto, pues existen otras alternativas más simples que pueden sacarnos de esos problemas, pero sin olvidarnos de tener las respectivas reglas para una seguridad informática.