Como todo en la vida, siempre hay un medio que dirige o que es la cabeza de todo, así es como se lo considera al Microprocesador, mismo que desde sus inicios no ha dejado de crecer debido a las funciones y grandes tareas a dirigir.
El Micro (microprocesador) es en definitiva un chip que tiene en su arquitectura millones de componentes internos, diseñados muy hábil y estratégicamente para que tenga el menor tamaño posible.
Los Micros, como los llamaremos en adelante, tiene una definición de CPU (Unidad Central de Procesos) que es con la que nació, pero éste término ha pasado a hacer referencia a todo el equipo que se encuentra en la carcasa o CASE, que es parte del ordenador.
La forma de los micros no ha variado mucho desde sus inicios, ya que en general y dependiendo de marca y tecnología, ha tomado la apariencia cuadrada, chip que se hace lo más delgada posible para que pueda ocupar el menor espacio al acoplarse a la placa madre. Su eficiencia o velocidad si ha variado, ya que antes se lo media en MHz, lo cual con el avance de la tecnología podemos apreciar que hoy en día se habla de GHz.
En el pasado se hablaba de que los ordenadores con procesador tipos XEON tenían la particularidad de disponer de dos procesadores en la misma placa madre; la tecnología a avanzado mucho, tanto así que en ordenadores Pentium IV se implementó la tecnología HiperTrading, lo cual era una simulación de dos procesadores en uno.
Hoy ya se tiene procesadores con núcleos separados en un solo Micro, por ello muchos habrán escuchado de los últimos procesadores CORE 2 DUO, CORE 2 QUAD, que inclusive tienen en su estructura interna 4 núcleos para un trabajo mucho más eficiente.
La potencia de los Micros depende en gran parte de las aplicaciones que cada día se hacen más crecientes, ya que por necesidades particulares, sean de sistemas operativos o de aplicaciones extremadamente fuertes, no se puede quedar estancada una tecnología en funciones avanzadas hoy y básicas para el mañana.