Cuando tratamos de ejecutar a una aplicación en el entorno de Windows 7, ésta tiene que ser realizada con todos los derechos administrativos si queremos hacer uso de todas las opciones y características de dicha aplicación.
Hay algunas maneras para poder ejecutar una aplicación con todos estos derechos, los que definiremos en el presente artículo y que en realidad son lo de más sencillo que podamos imaginar.
Opción 1.
Si estamos usando Windows 7, cada una de las aplicaciones que tengamos que ejecutar tienen que ser realizadas como «Administrador«, caso contrario no se activarán algunos servicios esenciales para nuestro trabajo. La opción más conocida por todos es hacer click con el botón derecho de nuestro ratón para elegir «Ejecutar como Administrador«, algo muy sencillo de realizar.
Opción 2.
Si necesitamos que la aplicación siempre se inicie con todos los permisos de administrados, entonces lo que tenemos que hacer es entrar a las propiedades de la aplicación. Para ello solo haremos click con el botón derecho de nuestro ratón en la aplicación de nuestro interés y seleccionaremos «Propiedades» del menú contextual.
En la pestaña «Compatibilidad,» solo tenemos que activa la casilla que dice: «Ejecutar como Administrador«, con lo que cada vez que le demos doble click a la aplicación, ésta nos pedirá una confirmación para que la ejecución como Administrador se haga factible.
Opción 3.
Pero si deseamos mayor facilidad en la ejecución de la aplicación con todos los derechos de Administrador, lo único que tenemos que hacer es:
- Presionar las teclas CTRL + SHIFT
- Posteriormente darle doble click a la aplicación sin soltar las teclas antes mencionadas.
Con éste sencillo procedimiento, la aplicación se ejecutará con todos los derechos de Administrador de forma automática, inclusive sin preguntarnos por una autorización para que esto se haga posible.