En la actualidad la banda ancha ha revolucionado totalmente la manera en que se utiliza internet, con la creación de aplicaciones en línea, la banda ancha y el internet inalámbrico han abierto otros horizontes en la web, pero, ¿cómo sabemos cuanta utilizamos? o mejor aún ¿cómo la monitoreamos?
Antes de plantear los posibles beneficios y soluciones para esta actividad, empecemos por ver qué es la banda ancha (ancho de banda, broad band, etc.), ésta es la transmisión de datos en el cual se envían simultáneamente varias piezas de información, con el objeto de incrementar la velocidad de transmisión efectiva. En ingeniería de redes o informática este término se utiliza también para los métodos en donde dos o más señales comparten un medio de transmisión. Es decir, se le conoce como banda ancha a la capacidad de las conexiones de internet para recibir y transmitir más datos (mayor rapidez en la conexión).
La llegada de la banda ancha, representó como ya comenté, un nuevo horizonte para la web pero también la dolorosa y la lenta muerte del modem tradicional (56Kb). Son varios los beneficios que se pueden obtener al monitorear el ancho de banda de una conexión: para auditar alguna empresa (en caso de que sea quiera administrar la red), conocer quién te roba internet, entre otros.
Un caso en específico es, cuando se cuenta con internet inalámbrico y éste está abierto, es decir, no se cuenta con ninguna clave para restringir el acceso a él y a la red, por lo regular, la señal de éste es tomada por otros dispositivos y en algunas ocasiones disminuyen notablemente la velocidad de la conexión. Una utilidad bastante interesante para evitar este tipo de percances es NetWorx, es gratuito, está disponible para todas las versiones de Windows y es muy sencillo de utilizar, incluso existe un manual de uso (en inglés).
Vía: BlogInformático