El proceso de hibernación es muy utilizado por los usuarios del sistema operativo Windows, para mejorar el rendimiento energético del sistema y del ordenador. Este proceso, deja al PC como si fuese un oso hibernando; virtualmente duerme al sistema para no tener que apagar el equipo, ya que al volver a encenderlo, tardará tiempo y consumirá recursos y energía extra, al levantar nuevamente todas las aplicaciones.
Proceso de hibernación
El proceso de hibernación, es un mecanismo de Windows, utilizado principalmente como una herramienta para ahorrar energía. Para lograr este objetivo, este proceso simplemente almacena en el disco duro la información de todos los programas que se están ejecutando, incluso la información que se encuentra en la memoria RAM del PC, al momento de activarse la hibernación.
Para realizar esta acción, debe contarse con una cantidad de espacio libre en el disco duro para guardar esta información. Mientras más información estemos utilizando, más espacio del disco duro es requerido por el proceso de hibernación. Es un proceso, que si bien nos permite ahorrar energía, consume a su vez una porción relativamente grande de espacio en el disco duro, por lo tanto, debe tomarse en cuenta este factor antes de tomar la decisión de activar el proceso de hibernación.
Cómo funciona el proceso de hibernación
El funcionamiento del proceso de hibernación es muy sencillo, simplemente realiza una copia de la información del software que se esté ejecutando y el de la memoria del PC, en el disco duro, para luego proceder a apagarlo, quedando el equipo en una especie de sueño que al ser interrumpido, carga todos los programas que se estaban ejecutando al momento de hibernar, tal cual como fueron dejados con anterioridad.
La gran ventaja con la que cuenta este proceso, frente al apagado tradicional, es la velocidad de puesta en marcha del equipo y la restauración de todos los programas que estábamos utilizando justo antes de ponerlo en estado de hibernación.
Como se puede ver, es un proceso sumamente útil cuando estamos trabajando y requerimos hacer una pausa medianamente larga y no deseamos cerrar las aplicaciones que estamos utilizando, ya sea por comodidad o para ahorrar tiempo de carga. El principal inconveniente del proceso de hibernación, es la gran cantidad de recursos que consume, por lo que si se utiliza de manera frecuente e ininterrumpida, puede generar errores y degradación en el rendimiento del sistema.